La Terapia Psicológica es un proceso de sanación que mejora la relación con nosotros mismos fomentando nuestro amor propio y creando habilidades y competencias que nos permiten enfrentar las problemáticas de nuestra vida diaria, resolviendo experiencias traumáticas de diversa índole mismas que afectan nuestro entorno social familiar y de pareja (en el caso de adolescentes o adultos). Uno de los momentos clave para iniciar un proceso psicoterapéutico individual es aquel en el que ya no es posible encontrar alternativas por nosotros mismos, o bien cuando los consejos o sugerencias de familiares y amigos ya no dan los resultados esperados, es en este momento que se requiere la intervención de un profesional que contribuya en nuestro desarrollo como individuos, desde un punto de vista imparcial, objetivo, pero sobre todo humano. La psicoterapia individual ofrece beneficios personales, sin embargo, los resultados abarcan a todo el contexto en el que nos desarrollemos, ya que no podemos olvidar que: si modificamos nosotros, modificamos nuestro entorno.